martes, 26 de junio de 2012

VITORIA-GASTEIZ. POBLACIÓN CERO (I)

¿Os imaginais que el ser humano desapareciese de la Tierra? ¿Cómo sería la Tierra sin nosotros? Ésta es la cuestión que se plantea en el documental de Canal Historia "La vida sin nosotros". Dicho documental combina imagenes reales con otras creadas por ordenador para reflejar los cambios que se producen con el paso de los años. Aquí no se plantea la causa de la desaparición del ser humano, simplemente se asume que desaparece y ya está. La conclusión: la Tierra estará mejor sin nosotros. Resulta asombrosa la capacidad regenerativa del planeta y como las especies naturales que llevamos, desde siglo, explotando y arrasando volverán a recuperarse en un tiempo relativamente corto.
Partiendo de datos expuestos en el documental... ¿Os preguntáis como sería Vitoria si se quedara sin gente?... Pues más o menos sería así...

1er. día sin humanos:

El dominio del ser humano ha llegado a su fin. Ya no poseemos el planeta. Bienvenidos a Vitoria, población 0.
Pasadas tan sólo unas horas del final, empezarán a apagarse luces por toda Vitoria. Las plantas que la abastecen de energia acabarán quedándose sin combustible porque no habrá nadie que las reposte y, por tanto, poco a poco, comenzarán a apagarse en cadena. Una planta nuclear, en este caso Garoña, aguantará más y seguirá en marcha un tiempo más. Un reactor nuclear de tipo medio tiene reservas de combustible para funcionar dos años pero, al no haber nadie que consuma electricidad ni nadie que se encargue de su mantenimiento, el reactor pasará al modo de seguridad en un par de días. Tampoco las plantas eólicas durarán mucho porque no habrá nadie encargado de su mantenimiento y terminarán parándose. Este fenómeno será mundial y la Tierra volverá a la oscuridad existente en la Edad Antigua.
Sin la energia, otros sistemas empezarán a fallar. Diversas bombas -encargadas de bombear agua del subsuelo- se pararán y, en consecuencia, todo el sistema del alcantarillado vitoriano acabará inundado en pocos días.

10 días sin humanos:

Toda la comida de los estantes de los Eroskis o de los Simplis se pudrirá. Los frigorificos estarán llenos de comida en descomposición. En muchas casas, el agua de los congeladores apagados ayudarán, momentaneamente, a animales domésticos como perros y gatos. Sin embargo, la gran mayoría de ellos morirán de hambre o sed porque quedarán encerrados en las casas. Tendrán que salir de ellas o morirán y, una vez fuera, deberán buscar comida. Los que lograsen escapar se volverán carroñeros y vivirán de los cadáveres y restos que encontrasen. Pocas especies de perros sobrevivirán. Las razas pequeñas no sobrevivirán más que unas pocas semanas y, únicamente, tendrán posibilidad aquellas razas de tipo medio. Los perros de patas cortas o de hocicos cortos o muy largos no sobrevivirán.
Otras especies como las ratas y los ratones acabarán saliendo y empezarán a alimentarse de restos. Arrasarán las casas y los supermercados vitorianos en los primeros meses. Después se mantendrán a base de cola, tela y celulosa y, una vez acabadas, recurrirán al canibalismo. Su número descenderá dramaticamente y acabarán abandonando los edificios y regresando a las zonas de campo donde serán presas de otros animales salvajes.

6 meses sin humanos:

Algunas especies animales salvajes como jabalíes, zorros y ciervos comenzarán a acercarse a la zona urbana al no haber una presión humana que los aleje. Una vez que el habitat se asentase no sería extraño ver lobos merodeando y ciervos pastando en la calle Dato.
En la próxima entrega: Vitoria tras 1 año sin humanos.